La era de los datos de salud y la vibrante innovación de las terapias digitales
RWD (Real World Data) hace referencia a los datos, recogidos a través de diferentes fuentes, relativos al estado de salud de los pacientes y a sus tratamientos. De acuerdo con la FDA , los avances tanto en RWD como RWE (Real World Evidence) están cobrando un protagonismo cada vez más significativo en la toma de decisiones para el cuidado de los pacientes… ¿o deberíamos decir mejor “en el cuidado de las personas”?
Hoy en día la sociedad tiende más a entender la salud con un papel más activo que reactivo, y no ocuparse de las personas solamente cuando ya tenemos alguna patología o complicación, sino también en el día a día cuando estamos sanos para que podamos:
- estar mejor informados,
- tomar decisiones más convenientes y más conscientes con respecto a nuestros hábitos,
- ayudarnos a prevenir enfermedades,
- convivir con determinadas condiciones médicas…
- vivir en mejores condiciones, en definitiva.
Esta nueva visión de la salud ya es innovadora por sí misma en nuestro modelo de sociedad, y lo es más aún, cuando va acompañada de servicios digitales que contribuyen a generar más datos de salud.
Somos plenamente conscientes de la cantidad de tecnología que nos rodea con capacidad de obtener datos, automáticamente o no, de nuestros hábitos, movimientos, estado de salud, condición física… Si bien, aunque la tecnología ha avanzado con pasos agigantados en muy poco tiempo en los últimos años, la verdadera innovación aún tiene mucho recorrido por delante.
La innovación en salud no es solo tecnología
La innovación no es solamente tecnología. No debemos identificar unívocamente un término con el otro. Pero sí es cierto que la innovación en salud tiene uno de sus componentes más importantes en la salud digital. Es decir, en el conjunto de tecnologías diseñadas no solamente para recoger datos de salud, sino incluso para “intervenir” en nuestra salud, en nuestros tratamientos. Lo que podríamos referir como terapias digitales, y ayudar a los profesionales en sus intervenciones, y a las personas en nuestra vida diaria, tengamos alguna condición médica o no.
Aún queda mucho recorrido por delante en las terapias digitales. Los avances en RWD y RWD, acompañados de las tecnologías agrupadas bajo los conceptos de Big Data e Inteligencia Artificial, están contribuyendo, aunque aún tímidamente, a desarrollar productos terapéuticos digitales… Es decir, algo que podríamos definir de forma simple como “tratamientos que están basados en un software”, o incluso más aún, “que son un software”, complementando, o quién sabe si sustituyendo en algunos casos, a los tratamientos farmacológicos.
Todo ello conlleva muchos retos complejos que tenemos que ir resolviendo, como por ejemplo, la regulación de las terapias digitales y su aprobación por parte de las autoridades sanitarias, y al mismo tiempo muchas nuevas y atractivas oportunidades ante nosotros, así quizás, la tan necesaria mejora de la adherencia de los pacientes (uno de los grandes problemas por resolver en nuestros sistemas de salud, v. “The Unmet Challenge of Medication Nonadherence. Fred Kleinsinger 2018”).
¿Quieres ser protagonista en la resolución de estos retos? ¿Quieres ser parte de una nueva compañía farmacéutica del futuro cuyos tratamientos no se basen en la química sino en el software, en los datos, en los wearables?
En el Máster de Innovación en Salud de la Universidad Complutense de Madrid adquirirás la visión y los conocimientos necesarios para buscar y aprovechar las posibilidades que nos trae la salud digital, y canalizar tus inquietudes para ser parte de la verdadera innovación que aún está por desarrollarse.
Este artículo ha sido elaborado por Fernando Rojas, profesor del Máster ISD de la Universidad Complutense que imparte la asignatura “Negocio Digital”.